Ayer, después de una sesión de Coaching, pasé por La Casa del Libro de la calle Orense de Madrid y me encontré con el nuevo libro de Silvia Leal, ‘Y de repente… llegó el metaverso. Claves para entender este universo y sus implicaciones’.
Mi amiga Silvia Leal es la más importante divulgadora científica de nuestro país. Doctora en Sociología, asesora de la Comisión Europea, experta de la Fundación Human Age Institute, conferenciante sobresaliente, ha sido directora de programas de innovación y tecnología del IE Business School y es autora de libros como ‘Ingenio, Sexo y Pasión’ o la trilogía ‘Consejos’. Su programa de RTVE ‘La Cuarta Revolución‘ (Onza Producciones) es imprescindible.
He de decir que leyendo este libro me he sentido como Dante en ‘La Divina Comedia’, guiado por el poeta Virgilio desde el infierno al cielo en busca de su amada Beatriz. En este caso, desde el infierno de la ignorancia (la de gente que habla del metaverso sin tener mucha idea) al paraíso de la claridad y el conocimiento.
En el primer bloque de tres capítulos, Silvia Leal parte del “día en que Zuckerberg se lanzó” (28-X-21) y apostó Facebook por Meta. La palabra proviene de “Snow Crash” (1992), obra de ficción especulativa, que puede convertirse en realidad, de Neil Stephenson. Es “el conjunto de experiencias inmersivas de alto impacto sensorial” (gran definición), la evolución de internet y las redes sociales. La autora lo compara con el precedente de Second Life, que fue un fracaso porque no era “customer-centric”, por falta de contenidos y experiencias e impacto, por búsqueda de dinero fácil. El metaverso triunfará porque la pista nos la está dando Tik Tok. Silvia explica brillantemente la Realidad Virtual y la Aumentada, con sus aplicaciones (arquitectura, educación, sanidad) y el fracaso de las Google Glass: lecciones aprendidas.
Tipología de metaversos: centralizados (controlados por empresas) y descentralizados (por una comunidad). Los casos de Meta (Facebook ha vivido el plagio de las stories de Snapchat, la sanción de la Agencia Española de Protección de Datos, Cambridge Analytics con una multa de 5.000 M $) y otros jugadores: Teams, Fortnite (Epic Games) o NVIDIA. El Blockchain (objetivo: el poder de la comunidad). El paso a los metaversos descentralizados o economías en el mercado inmobiliario o The Sandbox.
La aplicación del metaverso a ámbitos como la moda, desde el lujo (10% del total en 2030: Balenciaga, Gucci o Dolce & Gabbana están haciendo sus pinitos) a Zara y “los pequeños”, y la cultura (¿el metaverso es amigo o enemigo?): critoarte o conciertos, con éxitos y fracasos. “El metaverso no viene para sustituir al mundo real, sino para complementarlo”.
En el último bloque, las criptomonedas: Bitcoin (nacido el 31-X-2008), con sus dramas y debilidades, Ether (plataforma de software), que tampoco es perfecta. Y finalmente, el lado oscuro: violaciones en el metaverso (2018), robos de criptomedas (2022), granjas ilegales. ¿Está preparada nuestra sociedad? ¿Es una huida de valores?
Se trata de un libro magnífica, no sólo porque Silvia Leal es una divulgadora científica y tecnológica de primer nivel, con una capacidad didáctica sensacional, sino porque es socióloga (y se nota) con una visión empresarial, como consejera y participante activa en dos potenciales unicornios, ARFuture (MV y RA, con experiencias para Lexus en la Copa Davis o Disney Eternals) y Aygloo (IA). Practica lo que predica, desde la autenticidad.
El mundo avanza a toda velocidad y lo megaVUCA no es un entorno, es un estado de ánimo de curiosidad y creatividad. O nos “ponemos las pilas” con este libro o nos quedamos fuera del futuro, que es un presente desigualmente distribuido (William Gibbons). Gracias, Silvia, por un texto tan necesario en estos momentos de incertidumbre y charlatanería.
Ayer, mientras leía el libro de Silvia Leal, estuve escuchando a Thalía, la maravillosa cantante mexicana. De ella, te ofrezco ‘Estoy enamorado’, con Pedro Capó. “Que estoy enamorado/ Y tu amor me hace grande./ Que estoy enamorado/ Y qué bien, qué bien me hace amarte”.
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