Comenzamos la segunda semana de febrero, siete días que invitan a la Esperanza al mejorar el tiempo climatológico, que está permitiendo una reducción del número de afectados y de fallecidos en la mayor parte de las Comunidades Autónomas. Cada vez tengo más claro que las decisiones políticas de la mayor parte de nuestros gobernantes se explican sobre todo desde el modelo de las cinco fuerzas de Michael Porter: la hostelería, que apenas contagia, no tiene lobby por fuerte que sea su impacto en la economía nacional y en el empleo. Otros, con mucho menor impacto real, son más “influyentes” ante los gobiernos autonómicos y locales.
De la prensa de este fin de semana, elijo a siete magnífic@s, cuyos temas considero interconectados.
La Dra. Imelda Rodríguez, en El Día de Valladolid, escribía sobre “El síndrome de la rana hervida“. Si metemos un batracio en agua caliente, salta inmediatamente. Si la introducimos en una cazuela a temperatura agradable y vamos elevándola, la rana termina hirviéndose. “Un fenómeno que sucede cuando, ante un problema que es tan progresivamente lento que sus daños no llegan a advertirse o se perciben solo a largo plazo, la falta de conciencia provoca reacciones tardías e irreversibles. Una metáfora aplicable a muchas realidades. También a la dimensión política.” Una denuncia a la apatía y la resignación general que acaban con el sentido común. “Por eso conviene estar vigilantes, con los pies en agua fría si hiciera falta, para despertar y actuar (lo que supone también saber votar, cuando toca). El poder sigue estando en cada ciudadano y eso que llamamos felicidad es posible, es nuestro gran derecho y el principal deber de los que nos gobiernan. No lo duden: pensar con criterio, y actuar en consecuencia, nos salvará del destino de la cazuela.” Como ejemplo, las elecciones catalanas del 14-F. “¡Madre de Dios, qué bochorno cuando nuestros políticos no se detienen en lo importante!” Otra muestra es la invitación de ciertos políticos a los viajes de Semana Santa. La autora concluye: “Reclamemos nuestro derecho al bienestar definitivo. La opinión pública no puede elevar más su propio umbral del dolor. Hagamos, como sugería Nietzsche, de la desesperación mas profunda, la esperanza más invencible. Y hagámoslo, ahora.”
Como si se hubieran puesto de acuerdo estos dos grandes expertos en Educación, José Antonio Marina publicaba su Panóptico nº 23 (el número de grandes deportistas como Michael Jordan o David Beckman) sobre ‘La Democracia crédula‘. La ingenua, la de los conspiranoicos, con su plan de conspiradores y su división entre buenos y malos. Una Democracia fácil, alimentada por populismos. “No creo que los GAFA (Google, Apple, Facebook, Amazon) sean un grupo que diseña hacerse con el poder mundial. Lo que pretenden es hacerse con el negocio mundial de la información o del comercio o de la banca. Y estudiar su poder me parece necesario.” Tanto el maestro Marina como la Dra. Rodríguez nos recetan la misma medicina: fomentar el pensamiento crítico, desde la educación, por supuesto.
Se trata de ser buenos ciudadanos. Aquí entra en juego el tercer jugador de este quinteto maravilloso, también profesor (catedrático en Goteborg, visitante en Esade), Víctor Lapuente. La espléndida periodista Lucía Méndez se refería a él el sábado en su artículo ‘Ser mejores personas’. “Hay que hacerle caso a Víctor Lapuente. Aún a riesgo de que nos llamen buenustas”. Me refería en este Blog el pasado 17 de enero a su estupendo libro ‘Decálogo del buen ciudadano’.
En un mundo narcisistas, crédulo y desconfiado, de “ranas que se están hirviendo”, el profesor Lapuente nos propone diez ideas practicas para salir adelante. Entrevistado por Raúl Conde en su serie ‘Los intelectuales y España‘, este oscense nacido en 1976 aboga por abandonar el individualismo económico de derechas como el cultural de izquierdas. Una conjura de necios. “Sin patriotismo es difícil tener una buena democracia”.
Las prioridades son el patriotismo y Dios, o dicho de otra manera, de la Trascendencia . “En España, al margen de separatismos, falta un sentimiento de comunidad. El nacionalismo distingue entre buenos y malos. El patriotismo trata de unir”. “Las ideologías han sustituido a las religiones. Si no encontramos una idea trascendental a la vida, llenamos el vacío buscando un líder con moño o que monta a caballo”. “La derecha ha matado los valores democristianos. La izquierda, desde los 70, ha sustituido el patriotismo por un cosmopolitismo vago”. Respecto a la pandemia, “un Estado no puede ser sólo coercitivo, debe haber voluntad de cumplir normas. Si no confías en las recomendaciones, se produce un círculo de desconfianza”. Polarización: “A la derecha le toca no dejarse seducir por los campos de sirena del nacional-populismo y a la izquierda, hacer suyo el concepto de patria”. “En España falta un Parlamento fuerte para controlar la acción del Ejecutivo”. Respecto a Podemos, “en casi todas las coaliciones, elpartido minoritario acaba perdiendo votos”. A Ciudadanos, “necesitamos un partido de centro fuerte, pero lo que hace Inés Arrimadas, por mucho sentido que pueda tener, tiene un coste electoral”.
En la portada de Actualidad Económica, ‘El millonario negocio detrás de los influencers’. De los blogs a las empresas, por María Hernández. 73% de las marcas destinará parte de su presupuesto a influencerrs este 2021, con un precio medio por campaña de 100.000 € y unos 3.000 € por post o storie. En el Top Ten de l@s más influyentes, María Pombo, María Fruries, Grace Villareal, Rocío Osorno, María Lozano, Paula Echevarría, Gala González, Diego Barrueco, Anna Doménech y Álvaro Mel. El marketing de influencers ha salido reforzado de la pandemia,
‘De qué sirvió todo eso’, por la novelista Rosa Montero. Una llamada a la resiliencia, “Reconocer que el malestar forma parte de la vida te hace más resistente. Como el junco que se dobla y no se quiebra. A fin de cuentas, es la oscuridad la que nos permite entender lo que es la luz”.
Precisamente el padre del concepto de Resiliencia, el neurólogo y psiquiatra Boris Cyrulnik, era entrevistado por Carlos Manuel Sánchez en XL Semanal: “Cando los ciudadanos deben ser héroes, algo no funciona”. “La pandemia es la historia del eterno retorno”. “Los más perjudicados en esta situación van a ser los jóvenes. La madurez se retrasa en periodos de aislamiento”. “Estamos viviendo algo más que una crisis, es una catástrofe. Pero la palabra “catástrofe” viene del griego y significa “dar la vuelta”. Su origen es el teatro. Al final de la obra, un giro inesperado sorprende al espectador”. En opinión de Crulnik, tenemos la oportunidad de cambiar la manera de consumir, de concebir la movilidad, de relacionaarnos en pareja (el cortejo permanente), de educarnos. De aprender, en definitiva, más allá de hervirnos en la cazuela de esta democracia crédula y desconfiada (entinces, pronostica Boris Cyrulnik, viviremos un siglo de pandemias) u obedecer a un dictador, político y/o digital.
No caigamos en ‘El efecto Halo‘, como nos advierte la también novelista Carmen Posadas, “Se llega a favorecer, e incluso contratar o promocionar a alguien no por su valía profesional, sio simplemente por su perfil”. “El efecto halo, que da ventaja a unos, y el efecto diablo, que estigmatiza a otros, han existido siempre. Sin embargo, el dato nuevo es que ahora, gracias a las redes sociales, se tiende a ascender a los altares y bajar a los infiernos a personas por razones cada vez más absurdas y peregrinas. Que la gente venere a iconos sociales como Kennedy o Sissi obviando todos sus defectos no tiene la menor trascendencia. Lo que ya no parece tan inofensivo es que el efecto halo eleve a los altares y convierta en referentes y modelos a seguir a influencers que propugnan disparates y/o a políticos y charlatanes de feria cuyo único mérito es estar hasta en la sopa y tener miles de seguidores.”
Una estrella de siete puntas; Ranas hervidas, Democracia crédula, Buenos ciudadanos, Influencers, Sentido, Resiliencia y Efecto Halo. Y siete magnífic@s, siete sabi@s: Imelda Rodríguez, José Antonio Marina, Víctor Lapuente, María Hernández, Rosa Montero, Boris Ctrulnik y Carmen Posadas, que nos aportan soluciones.
La canción de hoy, ‘Axel F’ , por la Crazy Forg, la Rana Loca. Originariamente, en la pelicula de Eddie Murphy, ‘Superdetective en Hollywod’. Muy discotequera.
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