Ayer tarde disfruté mucho del diálogo en Instagram directo entre Mónica Galán Bravo, la gran especialista en Comunicación, y Rubén Turienzo, el autor de ‘Haz que suceda’. Rubén presentó PowerPlan. Un método para conseguir lo que te propones. Lo único que hay que hacer es HACERLO. Fue una conversación deliciosa de la que aprendimos un montón. Quiero muchísimo a estos maravillosos amigos. ¡Qué grandes sois!
No son buenos tiempos estos megaVUCA para el perfeccionismo. En la web de Psycholgy Today, una de mis preferidas, un artículo de la Dra. Alice Boyes, ‘Siete cosas que hacen los perfeccionistas y les autosabotean‘.
En un mundo tan competitivo, abundan las personas (especialmente las mujeres, según la Dra. Boyes) que se juzgan muy severamente por sus errores en lugar de disfrutar más y mejor por sus logros. ¿En qué medida el perfeccionismo puede ser autosaboteador?’
- Porque te provoca a seguir cada actividad, cada tarea, incluso las que no son importantes. Ya sabes que la clave está en centrarnos en lo importante, no en lo urgente.
- El perfeccionismo es frustrante y nos deja exhaust@s por exceso de trabajo. La solución pasa por la delegación efectiva, la colaboración de verdad (trabajo en equipo) y conceder valor a las relaciones personales.
- El perfeccionismo suele ser maniqueo: “o lo hago yo perfectamente, o no lo hace nadie”. En los retos, no tienes que estar 100% preparad@.
- Las personas perfeccionistas no piden ayuda. Tenemos que pensar en el cuadro en general, dejarnos ayudar y hacer las cosas con menos esfuerzo y en menos tiempo.
- L@s perfeccionistas suelen dedicar demasiado tiempo en decisiones menores. Es cierto que los detalles suelen marcar la diferencia, pero no justifican determinadas inversiones de tiempo. La intuición (la heurística) suele valer para elecciones menos importantes; funciona. Ponte en situaciones que te animen a tomar algunas decisiones más rápido.
- El perfeccionismo obliga en muchas ocasiones a marcarse objetivos tan elevados, tan ambiciosos, que luego se abandonan. En todo objetivo márcate la consecución de los pasos a seguir. El 10% de algo valioso es mejor que el 100% de nada.
- Las personas perfeccionistas suelen despreciar las pequeñas mejoras, que no resuelven completamente el problema, pero que mejoran la situación.
La Dra. Alice Boyes publicó en abril de 2018 un interesante artículo en la Harvard Business Review sobre l@s perfeccionistas. Como todo rasgo extremo de la personalidad, es una espada de doble filo. El perfeccionismo fracasa si tarda demasiado en decidir, no atiende a los costes de oportunidad o no es valiente por temor a que el reto no salga bien. Debe aprender de los éxitos, asumir la heurística (intuición), dejar de rumiar y disfrutar de mejoras del 1%.
Mi gratitud a la Dra. Alice Boyes, autora del ‘The Healthy Mind Toolkit’ y ‘The Anxiety Toolkit’.
Perfeccionismo y Autosabotaje. El autosabotaje (“sabot” en francés es “cuña”, como la que algunos obreros galos colocaban en las máquinas para impedir que funcionaran en la Revolución industrial) se reconoce por falta de tiempo, agobio, no saber qué hacer ni por dónde empezar y miedo cerval al fracaso. “Feel the feel and do it anyway” (Siente el dolor y hazlo en cualquier caso), nos recomienda la Dra. Teyhou Smyth (Universidad de Pepperdine en Malibú, California). El cerebro nos hace dudar, el corazón nos hace temer, la voluntad nos hace retrasar.
‘El virus que reseteó el capitalismo’ es el virus que resetea el perfeccionismo. Lo perfecto es enemigo de lo bueno, de la acción, de los logros. Tienes la necesidad de ser feliz para hacer felices a los tuyos.
La canción de hoy, Moi. Lolita (2000) de Alizée. Una de las pocas canciones de habla no inglesa que ha llegado al Top10 en UK. En España fue nº 1 de Los 40 el 13 de abril de 2002.
L’eau de vie, l’eau aux amours diluviennes
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