Jornada en Galicia, en Santiago de Compostela (la ciudad con más energía del mundo) con el Comité de Dirección de una de las principales empresas gallegas. Una empresa industrial líder en el mundo que pronto cumplirá los 80 años, que sigue los principios del Kaizen (de “Kai”, cambio y “Zen”, bueno; la mejora continua) y que está sometida a una transformación acorde a los cambios de la Globalización 4.0 Hoy tocaba integrar el Talento y su Gestión en el nuevo Plan Esrtaégico. Mi gratitud a su equipo directivo, con la responsabilidad de mantener el legado de esta compañía longeva y joven (con un plan estratégico ilusionante).
Anoche estuvimos más de 300 personas en la presentación del nuevo libro de Rubén Turienzo, el referente en Motivación. Se titula, como probablemente ya sepas, ‘Haz que suceda’. Una práctica e innovadora “caja de herramientas” para lograr tus objetivos.
La maestra de ceremonias fue Mónica Galán (autora del imprescindible ‘Método Bravo’ y una de las mejores coaches de oratoria de nuestro país) y en el acto, además del autor, intervinieron Roger Domingo (editor de Alienta), la representante de ACNUR (ONG a la que van destinados los derechos del libro), la boxeadora (siete veces campeona de España y actual campeona de Europa) Miriam Gutiérrez “la Reina”. Entre los invitados, José Mari Irisarri (Onza Entertainment), Pilar Jericó, Jorge Carretero, Luis Castellanos, Cipri Quintas, Alfonso Miñarro y muchísimos más.
La presentación de Rubén Turienzo, que distinguió para “llevarnos a la Luna” entre astrólogos (apasionados repetidores de citas ajenas), astrónomos (investigadores) y astronautas (con vivencias) para integrar la pasión, la ciencia y la perspectiva, y que presentó su método, me hizo pensar mucho sobre el Coaching, esté proceso de acompañamiento que ha pasado de desconocido a banal sin solución de continuidad.
¿Tiene sentido el Coaching, individual y de equipo, en la Globalización 4.0, la de la Cuarta Revolución Industrial (atención a la próxima serie de televisión de Silvia Leal sobre el poder de la tecnología)?
Creo firmemente que más que nunca. Se trata de un proceso (especialmente el Coaching Estratégico) que promueve la Reflexión, el Descubrimiento, un Plan de Acción y la generación de nuevos y mejores hábitos.
Si repasamos la espléndida definición de Talento de José Antonio Marina (2017) como “inteligencia triunfante que elige bien las metas, maneja la información, gestiona las emociones y practica las virtudes de la acción”, el coaching ayuda al profesional (el/la CEO, por ejemplo) y/o a su equipo directivo.
- A elegir bien las metas, porque en la Globalización 4.0 hemos de poner el foco en lo esencial, en nuestra Propuesta de Valor (al Talento, al Cliente, a la Sociedad). A través de la regla SMART (objetivos medibles, alcanzables y retadores, temporales y específicos) o, como la ha enriquecido Rubén Turienzo, SMARTER: Ecológicos (sanos para ti, tu gente, el conjunto del planeta) y con Recompensa. Un/a buen/a coach te reta en la calidad de tus objetivos (por ejemplo, Mónica Galán para que tus presentaciones sean mucho más impactantes o José María Gasalla para que tengas más confianza en ti mism@ y generes más confianza en l@s demás).
- Manejar la información: en tiempos de Big Data y “Fake News”, el proceso de coaching te ayuda a separar el grano de la paja. Honestidad para servir al cliente y al empleado (José María Cervera). ¿Cómo se pueden ganar unas elecciones? ¿Cómo se puede desarrollar la empatía? ¿Y la curiosidad (Teresa Viejo)? ¿Y el emprendimiento (Marta Grañó)? ¿Y la utilización de un lenguaje positivo para tu salud y tu bienestar (Luis Castellanos)?
- Gestionar las emociones: dado que la inteligencia emocional es el 90% del Liderazgo, hemos de entrenarla: desarrollando la autoconfianza, la serenidad, la motivación de logro, la empatía, el impacto e influencia. Atención al modelo i4 de NeuroLiderazgo de Silvia Damiano: l@s líderes hemos de ser inspiradores, integradores, imginativ@s e intuitiv@s.
- Practicar las virtudes de la acción. Las virtudes no son meramente valores enunciados (que pueden dar lugar a sesgos, a disonancia cognitiva), sino “valores vividos”. Porque, como nos enseñó Aristóteles, la Excelencia (el Learnability, diríamos hoy; la capacidad de aprender, de crecer) no es un acto sino un hábito. Se trata de “dar el do de pecho”, como diría el Tenor José Manuel Zapara.
El Coaching es más necesario que nunca en la Globalización 4.0 Por ello leeré y estudiaré ‘Haz que suceda’ de Rubén Turienzo para mejorar como coach estratégico. Te animo a aplicar su método para ti personalmente y, si eres líder.coach, en tus conversaciones de carrera.
Mi profunda gratitud a la anfitriona del Espacio Rastro Madrid (700 m2 para eventos, en el centro de la capital), a Reserva 64 (The wine experience: “WineFulNess”), a la gran Mónica Galán (una fiera sobre el escenario) y por supuesto a mi querido Rubén Turienzo, a quien tengo el honor de seguir desde la presentación de su primer libro, ‘Dirige de cine’. Hicieron pasible que el acto de ayer fuera un evento inolvidable.
Tenemos que elegir entre ser víctimas de los sucesos creados por otros o protagonistas de nuestra existencia, ayudados por l@s coaches y maestr@s adecuad@s.
La canción de hoy bien podría cantarla Mónica Galán Bravo: ‘A tu vera’ de Rosalía (BSO de Dolor y Gloria, de Pedro Almodóvar). Un tema inmortal de Juan Solano y Rafael de León.
“A tu vera, siempre a la verita tuya”