Hay momentos en los que el cuerpo demanda descanso de una forma clara. En este caso, dado que soy diabético tipo 2 y los pies son mi debilidad, con una herida profunda en el pulgar del pie derecho y una tendinitis en el mismo pie. Mi gratitud a mi podóloga “de cabecera”, Beatriz Simancas, a mi fisio, Gloria Vañó, así como a las personas que con tanto cariño preguntáis por mi estado de salud.
He aprovechado para leer ‘El Principio de la Posibilidad. Cómo la Física Cuántica puede mejorar tu forma de pensar, de vivir y de amar’, de Mel Schwartz, psicoterapeuta, asesor de pareja y autor de ‘El Arte de la Intimidad, el Poder de la Pasión’.
El autor repasa la promesa de la Física cuántica, que nos anima a:
- Abrazar la incertidumbre
- El Universo como potencial.
- La holística: el Universo como algo inseparable.
La necesidad de certidumbre, propia de la física clásica, nos lleva a la ansiedad. Tememos tomar malas decisiones, cuando el cambio es inevitable.
Asumir nuestro potencial (mentalidad de crecimiento). Tod@s estamos interconectad@s en un Universo participativo. Solemos perdernos “el cuadro total”. La consecuencia debe ser la empatía y la cooperación.
Sé la dueña de tu propio pensamiento. Porque los pensamientos tienen poder por sí mismos. Dejemos la zona familiar, la cómoda. El modo de pensar (thinking) es más profundo que los meros pensamientos (thoughts). Transcendamos la dualidad (una cosa o la otra) para ir a la conjunción (una cosa y la otra). Que tu forma de pensar vibre, a través de buenas preguntas (cuestionamiento). ¿Qué alimenta tus creencias?
Liberémonos. El mito de la objetividad mina la psicoterapia. Estamos en una epidemia de sufrimiento en el mundo. El Dr. Schwartz señala que la terapia de diagnóstico puede agravar el problema.
La auténtica autoestima está en el potencial, en la posibilidad. “Ama, no lo que eres, sino aquello en lo que te puedes llegar a convertir”. La vulnerabilidad es una fortaleza. Debemos replantearnos la autoestima, diferenciando los errores del fracaso. El perfeccionismo es un gran problema.
Más allá de la conexión cuerpo-mente. Las consecuencias de separar el razonamiento de la intuición son nocivas; hemos de reintegrarlas. Nuestro “sexto sentido” debe ser reivindicado. Sincronicidad.
El enredo es el latido del Amor. Debemos estar con personas que nos hagan crecer, elevar la energía de las relaciones. Invitar la disonancia es invitar al crecimiento. La clave es la relación y la coherencia en la comunicación. La incertidumbre es la esencia del romance.
No es una mera cuestión semántica. Se trata de cambiar nuestra forma de pensar, pasando de la fragmentación a la totalidad. Es liberarnos del victimismo y encontrar nuestra voz.
Desde joven me ha fascinado la Física cuántica. Me parece muy interesante su aplicación a la vida cotidiana.
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