Jornada de reuniones internas (por la tarde) y de proyectos (por la mañana). Mañana, fiesta en Madrid, tenemos visita de compañeros franceses y alemanes en una importante reunión estratégica.
He estado leyendo el especial de verano de Harvard Business Review, dedicado a la Inteligencia Emocional. En este número, los artículos “clásicos” de Daniel Goleman ‘What makes a leader?’ (¿Qué hace un líder?) y ‘Primal Leadership’ (Liderazgo Primario), escrito con Richard Boyatzis y Annie McKee; el de Martin Seligman sobre Resiliencia; el de Marshall Goldsmith sobre mantener la calma en situaciones difíciles.
Me ha hecho pensar especialmente ‘Agilidad Emocional’, de las expertas en Liderazgo Susan David y Christina Congleton, publicado originalmente en noviembre de 2013.
El concepto de Agilidad es especialmente importante para responder en el mundo VUCA (Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo). Susan David y Christina Congleton nos enseñan cómo evaluar nuestra agilidad emocional.
Tenemos que elegir una situación retadora en nuestra vida laboral, como recibir feedback negativo del jefe o pedirle un ascenso. A partir de esta situación, analizar nuestros pensamientos negativos. Preguntarnos qué podemos hacer para evitarlos. Identificar qué sentimientos están asociados. El consejo de las expertas es que la cadena pensamientos-sentimientos-comportamientos determina la agilidad.
Sobre los resultados de La Roja en el Mundial 2014, la gratitud por el ciclo que iniciaron en 2006 (nos han hecho disfrutar de lo lindo en dos Eurocopas y un Mundial) y una reflexión sobre el compromiso (que parte, no lo olvidemos, de la forma física y continúa con la concentración mental, el ánimo emocional y la coherencia de valores). Cuatro años son mucho tiempo en el deporte de alta competición y se pasa de la gloria a la derrota de forma inesperada. En los últimos cuatro Mundiales, tres equipos campeones se quedaron en la primera fase.
No hay líder sin equipo ni equipo sin líder, no lo olvidemos nunca. Mi más profundo cariño a Vicente del Bosque, un grandísimo entrenador, y a todos los jugadores que, repito, nos han hecho ser muy muy felices durante estos maravillosos años. El gol de Torres ante Alemania en Viena, el de Iniesta ante Holanda en Johannesburgo, el 4-0 a Italia en Kiev.