Sábado primaveral y casi estival. A tres semanas del inicio del verano, España está a 48 horas de la Fase 1 (ese invento gubernamental, en principio para evitar el rebrote), lo que supone en la práctica poder reunirse con personas queridas (hasta 10 personas) y la apertura de terrazas. Creo que Acemoglu y Robinson, en su análisis de las instituciones inclusivas y extractivas, del estrecho pasillo de la libertad, no han incluido la variable del clima del país. La solidaridad y responsabilidad nórdicas frente a la relajación y al “todo irá bien” caribeños. No sé, da qué pensar.
El pasado noviembre, Daniel Arjona entrevistó al profesor Acemoglu (MIT): La Reina Roja está fuera de control. Se refería a la sesión del Parlamento alemán del 23 de marzo de 1933 en la que el líder socialdemócrata Otto Wells, con una píldora de cianuro en el bolsillo, dijo: “En esta hora histórica, los socialdemócratas alemanes profesamos nuestra lealtad a los principios básicos de humanidad y justicia, libertad y socialismo. Ninguna Ley Habilitante puede destruir ideas que son eternas e indestructibles”. Se refería a la Ley que otorgaba, de manera “provisional”, todo el poder a Adolf Hitler. El resto es desdichada historia. La Reina Roja de Alicia en el país de las maravillas (Lewis Carrol) corre y corre para quedarse en el mismo sitio; así deben hacerlo y sociedad para no caer ni en el extremo de la anarquía ni en el autoritarismo. Cerrar el Parlamento, subvencionar al cuarto poder, ningunear a la sociedad civil, amenazar a la judicatura son prácticas peligrosas… “Las instituciones pueden ser papel mojado sin una sociedad que las defienda”, escriben Acemoglu y el politólogo James Robinson.
Semana intensa con cuatro redinarios (webinars), algunas propuestas comerciales, reuniones de Consejo de Fundación y de la start-up en la que participo… creo que el denominador común de todas ellas es la necesidad de Test de Liderazgo, Equipo, Talento y Aprendibilidad para salir pronto de la crisis económica y del empleo en la que estamos hasta el cuello. Ahora hemos de pasar de saber a hacer, de transmitir a transformar. La alternativa es quedarse “frozen”, congelados, como lamentablemente les pasará al 90% de profesionales y empresas. Frente a la desesperación, la inspiración.
En la web de Psychology Today, la experta en relaciones materno-filiales Peg Streep, autora de 13 libros sobre el tema, nos advierte de las ‘Cinco cosas que no hay que hacer si estamos confinad@s con un narcisista‘. La autora recurre al Dr. Craig Malkin, de la Universidad de Harvard (‘Repensando el Narcisismo’). Se trata de evitar:
- Aislarte. “Aislarte y separarte de la gente que te apoya eleva la ansiedad y conduce a la depresión”, explica el Dr. Malkin. Cuidado con cruzar desde la tristeza la línea de la autoestima.
- Quedarte en casa las 24 horas y los 7 días de la semana. Sigue los consejos/imposiciones de las autoridades sanitarias y toma el sol, date un paseo, sal al aire libre para fortalecer el sistema nervioso. Ten intimidad y autocuidado.
- Caer en trampas e interacciones tóxicas. Cuidado con quien trata de humillarte, aunque sea sutil e inconscientemente. No vas a poder cambiar a quien sólo piensa en sí mismo.
- Confundir algunas conductas. En tiempos de confinamiento, los narcisistas pueden darte alguna tregua porque te necesitan, o pueden ofrecerte ayuda en temas que te preocupan. No por eso abandonan el narcisismo. Sé cautelosamente optimista.
- Tratar de arreglarlo. Sé cordial, pero también. No vas a cambiar a un narcisista que está encantado de conocerse. Según el Dr. Malkin, desde su profunda experiencia, “El mayor peligro para quienes tratan de arreglarlo es que asumen demasiada responsabilidad, asumen que tienen que trabajar más, ser más sensibles y comprensivas, más cuidadosas en estos tiempos difíciles. Nadie puede recomponer una relación por sí misma. Cuando ya no hay confianza, cariño y amor, es tiempo de moverse”.
Cuidado con el “miedo a la compasión“, que han estudiado las psicólogas Olivia Merrit y Christine Purdon, porque puede conducir a la ansiedad. Es el miedo a compadecerte de ti misma, a empatizar de verdad contigo, porque en ese caso serías una egoísta. La autoconfianza (autoestima & autodignidad) es salud mental. Y cuidado también con la fascinación por los Darth Vader, por los villanos, por los malotes. Rebecca Krause-Galoni (Northwestern) la ha estudiado y llegado a la conclusión de que nos permiten explorar nuestro lado oscuro. Ese punto de presencia que nos intimida podría seducirnos, tentarnos. En palabras del maestro Yoda: “Cuando mires al lado oscuro, cuidados@ has de ser; porque el lado oscuro vuelve la cabeza”.
Para quienes piensen que reflexionar sobre los riesgos para la libertad o sobre estar confinad@s con un narcisista me convierte en pesimista, les recuerdo, siguiendo a Martin Seligman (padre de la Psicología Positiva junto con Mihalyi Csikzentmihlayi) que el optimismo es un estilo explicativo de la realidad, sobre lo bueno que ocurre y las oportunidades de mejora. No es ingenuidad ni nihilismo.
Por eso, esta tarde me voy a deleitar con los ‘1785 motivos por las que hasta un noruego (el país más feliz del mundo, según las estadísticas) querría ser español’. El nuestro es el país de El Quijote, Isabel I de Castilla y Carlos V, que acabó con la tiranía de Napoleón, el de las Cortes de Cádiz, el que ha hecho la mejor transición democrática de la historia. El país de Velázquez, Goya, Picasso y Dalí. El país de Leonardo Torres Quevedo (tío de mi abuelo Leopoldo Villar) y del Ingeniero Emilio Herrera. El país de Garcilaso, Cervantes, Lope, Quevedo, Espronceda, Lorca o Luis Cernuda. El país de Séneca, el más erasmista, el de la Escuela de Salamanca, el de Ortega y Gasset y Gregorio Marañón. El país de Rafael Nadal, de la ÑBA, de La Roja campeona del mundo (“Soy español, ¿A qué quieres que te gane?”). El país de la calidad de vida, el de la gastronomía, la cercanía y la rebeldía ante la injusticia. Un país que se queja, que no tiene la autoestima que merece, que no sabe venderse al exterior y que en su felicidad es más hedonista que exigente. Ya sabes que “motivo”, “emoción” y “movimiento” provienen de la misma raíz. Mi gratitud a Chema, Raúl y César, que están llevando adelante este movimiento.
La canción de hoy, ‘Desátame’ de Mónica Naranjo, que hoy cumple años.
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