Jornada de miércoles con dos procesos de coaching y una reflexión estratégica, amplia y profunda, sobre la actividad en 2020. Mi gratitud a l@s pupil@s y compañer@s,
Me gustó especialmente el artículo de Andrew Hill en Fincial Times ayer, ‘Messy jargon can swamp lucid business thinking’ (La jerga confusa puede empantanar el pensamiento empresarial lúcido). https://www.ft.com/content/595b6640-112a-11ea-a7e6-62bf4f9e548a?desktop=true
En la sesión del clausura del pasado Global Peter Drucker Forum (20-21 de noviembre) en Viena, Julian Birkinshaw (London Business School) señaló que “hemos de abdicar de la idea de que una gran idea nueva va a aparecer y lo va a cambiar todo”. Lo que está cambiando, a toda velocidad, es la práctica de la dirección (The practice of management), uno de los títulos más afamados de Drucker, no por casualidad.
El tema del Foro este 2019 fue ‘El poder de los ecosistemas’. Como dijo el pionero de internet Vint Cerf (Google), una red estable, de interoperaciones y adaptable. Las metáforas son poderosas (el periodista del Financial Times cita a la académica Amy Webb, y bien podría hacerlo de D. José Ortega y Gasset). El propio Peter Drucker (1909-2005) se definió a sí mismo como un “ecologista social” por su capacidad de analizar las organizaciones como si de la naturaleza se tratara.
Cuidado con las metáforas mezcladas, porque generan caos. Cuidado con la jerga elitista del “management”, porque puede ser una buena excusa para hacer poco o nada. El gran Charles Handy (1932), uno de los grandes pensadores del mundo empresarial, nos advertía en el Global Drucker Forum de 2017 (sobre “la Dimensión humana de la empresa”) que la Digitalización podía convertirse en “una prisión para el alma”.
En palabras de Andrew Hill, “la jerga nos distrae de los problemas reales”. Un ecosistema, por definición, no se puede “diseñar”, “construir” ni “liderar”. Pero tod@s sabemos lo fácil que se puede destruir.
Mañana, en Executive Excellence (junto con el diario Cinco Días), Federico Fernández y su equipo nos contarán las principales lecciones del Global Peter Drucker Forum 2019.
Leyendo este provocador artículo del FT, he pensado en la relación y distinción entre Messi (sexto balón de oro en la última década, galardonado ayer) y “messy” (confuso, sucio, desaliñado, enmarañado). Leo Messi es uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos y sus números le avalan: 1.097 goles en 1.214 partidos (un promedio del 90%; en primera división, del 93%) y 281 asistencias (un promedio de 0’33 por partido; 0’36 en primera división). Es el único jugador en anotar más de 40 goles en más de 10 temporadas consecutivas y el mayor goleador y mayor asistidor del siglo XXI. Obras son amores y no buenas razones. Tuve el honor de escribir, junto con la Dra. Leonor Gallardo, el libro ‘Messi, Falcao y Cristiano Ronaldo’, traducido a varios idiomas.
Una de las canciones favoritas de Leo Messi es ésta de Bruno Mars, 24k