Summer has come. Ayer fuimos a ver ‘Men In Black International’, la versión actualizada y feminista (que es el “new normal” en el cine tras el #MeToo) de las pelis de Will Smith y Tommy Lee Jones. En esta caso, la prota es Tessa Thomson (la novia de Creed y Valkiria en ‘Vengadores’ y ‘Thor’), su jefe es Liam Neeson y por encima de él Emma Thomson (que ha creado una identidad espectacular a sus 60 años y tiene una serie y 5 cintas en postproducción), su colega, el bello Chris Hemsworth (Thor), haciendo una vez más de tontorrón y su enemiga, la sueca Rebeca Ferguson (la soprano de ‘The Greatest Showman’, que aparecerá de nuevo en ‘Misión Imposible’ en 2021). Una película muy entretenida, con un guión muy irónico de Matt Holloway y Art Marcum (‘Iron Man’, ‘Transformers’) y un diseño de oficinas, objetos y vehículos deslumbrante. Recomendable para pasar un buen rato.
He estado leyendo en la web de Psychology Today el último artículo (18 de junio, el martes pasado) del psicólogo social y divulgador científico Mark Travers: ‘¿La clave de la atractividad femenina?’
Un nuevo estudio sugiere que el Capital Atractivo en la mujer no es cuestión de fertilidad sino de nubilidad.
El Dr. Travers se hace eco de la investigación de W. D. Lassek y Steven Gaulin (Departamento de Antropología de la UCSB, Universidad de California en Santa Barbara) publicado en ‘Evolution and Human Behavior’ con el título ‘Evidencias que demuestran que la Nubilidad y el valor reproductivo son las claves de la atractividad física femenina humana’ (2019).
Hasta ahora, antropólog@s y psicólog@s creían que la clave de la atractividad femenina era la fertilidad y la salud percibida por el varón, que se mide con dos KPIs (Indicadores Clave de Rendimiento): el WHR (waist-to-hip ratio, cociente entre cintura y cadera, cuanto más bajo mejor) y el BMI (Índice de Masa Corporal, también más valorado cuanto menor).
La mencionada investigación cede el cetro a la Nubilidad, que el DRAE define como la “edad en la que se está en condiciones de contraer matrimonio”. Lassek y Gaulin han analizado los casos de 12.000 mujeres de menos de 50 años entre 1988 y 1994. Su hipótesis era que los WHR y BMI serían más bajos en los momentos de mayor fertilidad; sin embargo, lo son en los de mayor nubilidad. Además, las mujeres núbiles poseen mayores niveles de ácidos grasos Omega 3, que interviene en el desarrollo del cerebro.
“Nuestro análisis sugiere que bajos niveles de WHR son un poderoso indicador de nubilidad porque se dan cuando el desarrollo del esqueleto ya se ha producido (…) Tanto el BMI como el WHR son significativamente menores en las mujeres núbiles”, han escrito los investigadores de la Universidad de California en Santa Bárbara.
En la práctica, la diferencia es que la nubilidad femenina se alcanza a los 15-19 años en tanto que la fertilidad tiene su pico a los 25. El momento de mayor nubilidad suele ir aparejado de baja fertilidad.
Mi gratitud a los doctores Travers, Lassek y Gaulin por sus hallazgos.
Pasando de la psicología y la antropología a la psicología social (cada vez estoy más fascinado de cómo cambiamos los seres humanos de individuos a grupos), esto significaría pasar de la clave del Capital Atractivo en las organizaciones de la fertilidad (crecer rentablemente) a la nubilidad (“casarse” el Talento con la Organización). Una cuestión interesante.
En el capitalismo, lo que querían los empleados era una empresa fértil para trabajar en ella “toda la vida”. Una compañía sólida, poderosa, indestructible, protectora. En esta nueva era, el Talentismo, l@s profesionales (y especialmente l@s Millennials y Centennials) desean experiencias, un proyecto en el que poder crecer, una etapa (en su carrera profesional y personal) estimulante y enriquecedora.
Las implicaciones para el “Future of Work” (Futuro del Empleo) son claras: en el “Imán de Talento” (Talent Magnet), desde la nubilidad (¿Hacemos un proyecto en común? Te necesito) y no la “fertilidad” de la organización: desde la Experiencia de Talento (no paterno-filial, sino entre iguales), desde la Diversidad del Ecosistema Híbrido (enriquecedora en sí misma), desde el aprendizaje continuo (revolución de las competencias) y por supuesto desde el Liderazgo Digital (no para “mandar” sino para que l@s profesionales puedan dar su mejor versión).
‘Men In Black: International’, que en su primer fin de semana en el mundo ya ha recaudado más de lo que costó ( 110 M $), da para un buen Cine Fórum Empresarial. La agente M (Tessa Thompson) es la que “elige” trabajar para MIB (y no al revés) y así se lo demuestra a la agente O (Emma Thompson). La revalidad entre el agente H (Chris Hemsworth) y el agente C (Rafe Spall) es de confianza ante su jefe (Liam Neeson). M está “en prácticas” y elige el tándem para su proyecto… Por cierto, tanto la californiana Tessa Thompson como el australiano Chris Hemsworth, el londinense Rafe Spall y la sueca Rebecca Ferguson han nacido el mismo año: 1983. Por tanto, son Millennials.
La canción de hoy, de Men In Black. “We’ll save the Earth, We’ll save the planet’, cantado por los alenígenas.
En la banda sonora de ‘Men In Black; International’, el ‘Sex Shooter’ de Prince:
y la Elegía (op. 3 Nº 1) de Rachmaninov