Un día muy intenso. Por la mañana, en Lleida, con una gran compañía cliente (más de 30 de los principales directivos del grupo) para compartir ideas sobre Liderazgo y Calidad directiva. Mi gratitud a Carmina, a todos los participantes y a mis compañeros de Right Management Rafa Díaz y Manel Otero.
A las 15,30 he tenido el honor de participar en el Forum EFQM con una conferencia (en inglés) sobre ‘La Agilidad a través de la Cultura’. A nuestro presidente europeo, Stefano Scabbio, no ha podido venir a Madrid y hemos hecho lo posible por comentar nuestro modelo.
La Agilidad en las organizaciones. Como sabes, el concepto “agilidad” proviene del mundo del deporte, más concretamente de la gimnasia. Proviene del latín “agere”, moverse, ir de un lado a otro. La agilidad, junto con la fortaleza, la sostenibilidad y la belleza, eran las cuatro cualidades de los “cuerpos gloriosos” en la Antigüedad clásica. Como ejemplo, la gimnasta Almudena Cid, participante en Atlanta 96, Sidney 2000, Atenas 2004 y Pekín 2008. En 21 años de carrera deportiva, 8 campeonatos de España y 3 finales internacionales.
En términos de agilidad empresarial, significa adaptarse a un entorno híperVUCA. Tenemos dos fuerza contrapuestas: el cambio (externo) y la transformación (interna). En esta competición, las organizaciones se juegan su supervivencia. Por ello, la tasa de mortalidad empresarial se ha multiplicado por cinco en los últimos tres cuartos de siglo. La Ley de Revans nos habla de la supervivencia de las organizaciones en función de adaptarse al entorno, ágilmente. Estamos en un mundo VUCA, y como decía el replicante Rory Batty, en el primer Blade Runner (1982), “vemos cosas que no creeríais”: Donald Trump como presidente, un fado portugués ganando Eurovisión, el Brexit, Alternativa para Alemania en el Bundestag, Emmanuel Macron, la secesión de Cataluña, el poder de Xi Jiping…
Cultura. El término procede de Cicerón (a partir de la “agricultura”) y significa “lo que se cultiva”. La Cultura Corporativa es un concepto de Edgar Schein (en 1980) que definió como “un conjunto de asunciones básicas compartidas que aprende el grupo para resolver sus problemas de adaptación externa y cohesión interna, y que al funcionar se consideran válidos y se enseñan a los nuevos miembros como la forma correcta de percibir, pensar y sentir en relación a esos problemas”. El propio Schein reconoció que es el atributo de la organización más difícil de cambiar. Sin embargo, lo más importante para los líderes es precisamente gestionar el cambio.
¿De qué se compone una cultura? Siguiendo a Schein, de tres niveles: asunciones y creencias (inconscientes), valores expuestos (desde la estrategia a la visión y misión) y artefactos (procesos y estructuras visibles de la organización). Entonces, para transformar una cultura hemos de partir de las creencias (introspección, por ejemplo a través del coaching individual y de equipo), redefinir los valores corporativos, llevarlos a principios que guíen, de ahí a comportamientos y convertirlos en hábitos.
He cambiado el cambio de concepto de seguridad (del “empleo para toda la vida” a una carrera profesional atractiva) y la revolución competencial (skills revolution). La digitalización no elimina puestos de trabajo (de hecho, crea 2’4 por cada uno que elimina, según Gartner); lo que hace es transformarlos cualitativamente. Cada vez el talento necesita de mayor creatividad, inteligencia emocional y capacidad de negociación.
Hemos presentado el Modelo AGILE. En inglés, Awareness, Goals, Innovation, Learnability, Engagement.
- Awareness: Consciencia individual y colectiva. De ser “inconscientemente incompetentes” a inconscientemente competentes” (talento natural). La dirección debe fomentar la consciencia (inteligencia ejecutiva).
- Goals: Cuanto más VUCA sea el entorno, mayor necesidad de estrategia. La ejecución, que es el 90% de la Estrategia, a través de las cuatro disciplinas (Covey): POEs (Principales Objetivos Estratégicos), Palancas, Seguimiento, Cuadro de Mando.
- Innovación, tanto los negocios principales como en las nuevas líneas de negocio.
- Learnability, concepto acuñado por Mara Swan. Es la curiosidad, la voluntad de aprender, la aplicación práctica de los nuevos conocimientos.
- Engagement (involucración, compromiso, enganche). He citado a Silvia Damiano y las 3 E en inglés (disfrute, conexión emocional, empowerment) de su libro ‘Engage Me’.
Finalmente, cabe citar a Dickens: “Fue el mejor de los tiempos, fue el peor de los tiempos” (Historia de dos ciudades), porque el modelo EFQM es el mejor para la agilidad desde la cultura en los nueve criterios, del Liderazgo a los Resultados; y puede ser el peor si los procesos son rígidos y burocráticos. Y a Elvis Presley: “A little less conversation, a little por action”.
Mi gratitud a Ignacio Babé, a Mercedes, Miquel, Nayra, Susana y todo el equipo del Club de Excelencia en Gestión.
He tenido finalmente el placer de escuchar a María José Martín, DG de Right Management, en el III Congreso de Escuelas de Negocios. Una gran conferencia sobre digitalización y learnability. Gracias, María José, por tu estupenda exposición.
La canción de hoy, ‘Absolute beginners’ de Bowie: www.youtube.com/watch?v=r8NZa9wYZ_U“If your love song”.